¿Son los perros más cariñosos que los gatos? ¿Son ciertas nuestras creencias?

Inicio > Blog > ¿Son los perros más cariñosos que los gatos? ¿Son ciertas nuestras creencias?

Categorías

En el mundo de las mascotas, no hay duda de que los perros y gatos ocupan un lugar especial en el corazón de millones de personas en todo el mundo. Los debates en torno a la preferencia entre unos y otros han existido durante décadas, y uno de los aspectos más recurrentes es la supuesta diferencia en la cantidad de cariño que estos animales pueden brindar a sus dueños. Hay quienes creen y afirman que los perros son innegablemente más cariñosos, mientras que otros defienden que los gatos también pueden ser afectuosos. Aunque la realidad es que ambos animales tienen una asombrosa capacidad para brindar amor y afecto a sus dueños, aunque lo expresen de maneras diferentes. Pero ¿qué dice la ciencia sobre esta cuestión?

Los Perros: fidelidad y afecto incondicional

Los perros son conocidos por su fidelidad inquebrantable y su afecto incondicional hacia sus dueños. Desde un pequeño cachorro hasta un sabio perro mayor, estos animales siempre establecen vínculos profundos con sus familias humanas. Algunas de las formas en que los perros demuestran su cariño incluyen:

  • Cola en movimiento: El movimiento de la cola es una de las señales más evidentes de felicidad en un perro. Una cola que se agita con alegría es un claro indicador de que tu perro te ama y se siente emocionado de verte.
  • Lamidas: Los lametones son una muestra clara de afecto canino. Cuando lo hacen demuestran cariño y apego hacia ti.
  • Cercanía física: Los perros suelen buscar la cercanía de sus dueños. Siempre quieres estar cerca, ya sea acurrucándose a tu lado en el sofá o siguiéndote por toda la casa.
  • Juegos y tiempo de calidad: El juego es una forma importante en la que los perros establecen vínculos emocionales con sus dueños. Pasar tiempo jugando juntos es una muestra de afecto mutuo.

Los Gatos: amor en sus propios términos

Aunque los gatos a menudo son etiquetados como más independientes que los perros, también pueden formar relaciones cercanas y demostrar afecto de maneras únicas, como:

  • Ronroneo: Es una muestra inequívoca de que se siente cómodo y feliz. Pueden ronronear cuando los acaricias o cuando están cerca de ti. Es una de sus muestras de afecto más evidentes puesto que este ronroneo lo emiten como señal de calma o tranquilidad.
  • Frotamiento: Los gatos marcan su territorio y muestran afecto frotando su cabeza o cuerpo contra ti. Esta es una señal de que te consideran parte de su familia.
  • Regalos: Aunque a veces puede resultar desagradable, cuando un gato te trae «regalos» como presas cazadas, en realidad está mostrando su amor y cuidado hacia ti, tratándote como un miembro de la familia que necesita ser alimentado.
  • Mirada suave y parpadeo lento: Un gato que te mira suavemente y parpadea lentamente está demostrando confianza y afecto. Este es un lenguaje corporal felino que demuestra que se siente a gusto contigo.

El factor del vínculo

La relación entre un animal y su tutor es compleja y puede variar ampliamente según la personalidad y el temperamento del animal, así como la forma en que se les cría, se les trata y se les educa. En el caso de los perros, la relación que establecen con su familia humana suele estar relacionada con su historia de domesticación. Los perros han sido criados selectivamente a lo largo de los años para trabajar junto a los humanos y responder a sus necesidades emocionales. Esto ha llevado a que los perros sean considerados animales altamente sociables y afectuosos, capaces de formar fuertes lazos emocionales con sus tutores.

Los gatos, por su parte, tienen una historia de domesticación diferente. Aunque los gatos también han vivido junto a los humanos durante siglos, su domesticación ha sido menos controlada y más reciente en comparación con la de los perros. Esto ha llevado a que los gatos mantengan rasgos más independientes en su comportamiento, aunque muchos dueños de gatos reportan tener relaciones muy cercanas y cariñosas con sus felinos.

La variedad de personalidades

Es importante recordar que la personalidad tanto de perros como de gatos puede variar significativamente de un animal a otro. Algunos perros pueden ser extremadamente cariñosos y siempre dispuestos a mostrar afecto, mientras que otros pueden ser más reservados. Lo mismo ocurre con los gatos; algunos son juguetones y demandantes de atención, mientras que otros prefieren mantener mayor distancia e independencia.

Evidencia científica

Pero ¿qué dice la ciencia al respecto? Varios estudios científicos han abordado la cuestión de si los perros son más cariñosos que los gatos o no. Estas investigaciones han arrojado resultados mixtos. Por ejemplo, un estudio publicado en la revista «Animal Cognition» en 2015 encontró que los perros son más propensos a buscar la interacción social con los humanos que los gatos. Sin embargo, otro estudio publicado en la revista «PLOS ONE» en 2017 concluyó que los gatos pueden ser tan cariñosos como los perros, pero expresan su afecto de manera diferente.

La importancia de la socialización

Independientemente de si se trata de un perro o un gato, la socialización temprana y positiva es clave para desarrollar un animal de compañia cariñoso y equilibrado. Exponer a los animales a diferentes experiencias y personas desde una edad temprana puede ayudar a que se sientan cómodos y seguros en una variedad de situaciones sociales.

En definitiva, la cuestión de si los perros son más cariñosos que los gatos no tiene una respuesta definitiva. La cantidad de cariño que un animal puede ofrecer depende en gran medida de su personalidad individual, su crianza y su relación con su dueño. Lo más importante es encontrar una mascota que se ajuste a tu estilo de vida y personalidad, y trabajar en la construcción de una relación sólida y cariñosa con ella, ya sea un perro o un gato.

Scroll al inicio